Soluciones nutritivas, pH y CE

Soluciones Nutritivas para el Cultivo de Plantas: Un Enfoque Profesional

Concepto de Solución Nutritiva para Plantas:

Una solución nutritiva representa una amalgama precisa de agua y nutrientes esenciales destinados a promover el crecimiento y desarrollo óptimos de las plantas. En su composición se encuentran elementos vitales para el ciclo de vida vegetal, tales como macronutrientes -como el nitrógeno, fósforo y potasio- micronutrientes -entre los que se incluyen hierro, zinc y cobre- y otros componentes fundamentales como calcio y magnesio.

Evolución Histórica de las Soluciones Nutritivas:

El uso de soluciones nutritivas se remonta a tiempos ancestrales, donde se empleaban materiales como cenizas y estiércol para fertilizar cultivos en la época romana. Sin embargo, fue en el siglo XIX cuando se gestaron formulaciones más precisas y científicas. En 1860, el científico alemán Julius von Sachs identificó los elementos esenciales para el crecimiento vegetal, sentando así las bases para el desarrollo de las soluciones nutritivas modernas.

En el contexto de la agricultura de precisión, la preparación de las soluciones nutritivas implica la utilización de fertilizantes solubles, adaptados a las necesidades específicas de las plantas que varían a lo largo de sus distintas etapas fenológicas. Durante las fases vegetativas, la demanda de nitrógeno y fósforo es considerable, mientras que en etapas

La regulación del pH y la conductividad eléctrica (EC) en las soluciones nutritivas reviste una importancia crucial debido a su influencia directa en la disponibilidad y absorción de nutrientes por parte de las plantas. Un pH adecuado garantiza la óptima disponibilidad de nutrientes para la absorción radicular, y se logra mediante la acidificación del agua con ácidos como sulfúrico, fosfórico o nítrico. Por otro lado, una EC controlada permite mantener la concentración de nutrientes en la solución, previniendo tanto deficiencias como toxicidades. La medición de la EC en el suelo o sustrato proporciona información valiosa sobre la eficacia de la absorción de nutrientes por parte de las plantas, lo que subraya la importancia de definir niveles ideales para asegurar su óptimo crecimiento y desarrollo.

La influencia del pH y la EC en las plantas es significativa. Un pH desajustado puede comprometer la disponibilidad de nutrientes esenciales, resultando en deficiencias que afectan negativamente el crecimiento y desarrollo vegetal. Por su parte, una EC inadecuada puede ocasionar daños radiculares debido a la acumulación de sales o exceso de nutrientes, disminuyendo la capacidad de absorción hídrica y nutritiva de la planta, lo que impacta negativamente en su salud y rendimiento.

Es imperativo mantener valores estables de pH y EC a lo largo del ciclo de vida de la planta para asegurar un crecimiento saludable y un rendimiento óptimo. Las variaciones en estos parámetros pueden inducir estrés en las plantas, haciéndolas más susceptibles a enfermedades, plagas y condiciones ambientales adversas. El mantenimiento de una solución nutritiva equilibrada y estable se erige como una práctica esencial para maximizar la productividad y calidad de los cultivos en sistemas de cultivo controlados.

Establecimiento de Set Points y Acciones Correctivas:

En Hydrobit usamos "set points" que representan niveles tanto máximos como mínimos en los cuales las plantas crecen de manera óptima. Cada cultivo posee necesidades específicas, aunque en términos generales, el pH suele oscilar entre 5.5 y 6.5, mientras que la conductividad eléctrica se sitúa entre 0.5 y 2.5 mS. Es importante destacar que la sensibilidad a estos parámetros varía según el tipo de cultivo, lo que requiere una configuración específica para cada campo.

Una vez establecidos estos "set points", es posible programar sistemas de alerta que se activen cuando alguna de estas variables exceda los límites establecidos. Por ejemplo, si la EC supera el límite superior, se activaría una alarma indicando la necesidad de un riego abundante para realizar un lavado de sales y evitar la acumulación, evitando así un estrés en la planta. Por otro lado, si la EC está por debajo del nivel mínimo, la acción correctiva implicaría la aplicación de fertilizantes para elevar la fertilidad y salinidad del suelo o sustrato.

Estas medidas preventivas y correctivas, basadas en la supervisión y control continuo de los parámetros clave, son fundamentales para mantener un entorno óptimo para el crecimiento y desarrollo de las plantas, maximizando así su salud y rendimiento en sistemas de cultivo controlados.